Basilica de san pedro
ha pasado a ser uno de los símbolos de Roma y un lugar donde Roma se hace universal, recibe y mira hacia todo el orbe. La grandeza y hermosura de la construcción son un símbolo de la aspiración por acercar el cielo a la tierra o hacer que la tierra ascienda hasta la cúpula celeste. Grandezas y límites, miserias y aspiraciones convertidas en arquitectura e historia para celebrar al primer papa, el pescador Pedro, que aquí recibió la muerte por ser cristiano.
Este lugar permite el
acceso a los turistas con movilidad reducida con una rampa accesible cerca de
la entrada al lado derecho, inclusive se pueden encontrar dentro baños
adaptados al igual que un ascensor para poder llegar a la parte alta de la
basílica. Pero sin embargo, no se puede acceder a la parte superior de la
cúpula ya que para llegar ahí se tiene que subir unas escaleras empinadas.
Lamentablemente no es posible acceder a la necrópolis ni a los jardines si
viajas en silla de ruedas .